miércoles, 1 de abril de 2009


La no forma de ser humano.
La potencia en movimiento.


(Monólogo esquizofrénico, en diálogo)


Negro: forma chocante e irónica.
Rojo: forma inocente.
Gris: forma conformista.


- Qué excelencia hay en la dicotomía de abrirse. Y... ¿ahora qué?
- Me levanto y me formo de nuevo.
- ¿Estoy pensando en caminar? ¿En moverme?
- Mejor me quedo en mi inocente forma inicial, sin ambición de necesidad.
- ¿Pero qué me pasa? La necesidad de ambición no juega conmigo, sino que moldea mi nueva forma.
- De todos modos estoy moviéndome, estoy rechazando el principio.
- Es que potencialmente estoy activo.
- Me veo de pié y en al aire. Mejor me quedo en la seguridad del suelo.
- Eso es lo que hago. Lo que debo. Lo que el deber debe en mí hacer: Trato de trabajar en la seguridad del suelo. En la silenciosa claridad que, el temor de entender al aire, empuja mis pies al suelo.
- Ah... claro. Salto lejos y alto para ver un espacio entre mi cabeza apoyada en mis pies, y mis manos tocando el cielo.
- Es posible. Pero no trato de volver a mi principio. ¿O si?
- Es la idea. Trabajar, ensuciarse de ideas y sentidos, de tal manera que, nos hartemos de nosotros mismos y decidamos volver a la no forma.
- ¿A la forma inicial?
- Si. A la potencia inicial[1].
- Salvaje error, me pregunto: ¿Por qué la no-forma tampoco es potencia?
- ¿No es potencia? ¿Ni potencia de ser?
- Claro que no. Y si así fuera, deber mío seria realizarme forma nueva. En cualquier forma que desee.
- Me parece... que la potencia me debe.
- Seguro que me debe. Me robaron miles de formas. Miles de posibilidades en forma de ser.
- Pero ya me condenaron a ser esta forma actual. Y a negar mí forma potencial.
- Eso... ¿es bueno o malo?
- Es terrible mirar como corro debajo de mis narices, mientras ruedan mis manos en la sucia idea de tocar nueva forma.
- Pero. La idea me corrompió. Me dio potencia.
- Es lo mejor que me pudo pasar. Porque podría ser nuevamente: un edificio y trabajar. O ser trabajo. Podría ser silla o mesa...
- Un arma o la voluntad que la usa.
- Podría ser un perro o un perchero. O una casa y un billete.
- O una maquina de ser no seres en potencia de ser.
- ¿Y qué me preocupo? Si ya estoy haciendo seres actuales en actos, formas.
- ¿Estoy actuando?
- Es como girar mientras salto pensando en mi potencia.
- Así, no llego a ningún lado. A ningún acto.
- Porque, como me lo dije antes, soy acto y me robaron la potencia. 0 acaso será que la materia que me compone no es mía, y ya fui potenciado a este acto, nada más.
- Claro, pude haber sido de cualquier material: como piedra o plata.
- Espuma o madera.
- Sabía, dije, que me debían la potencia. Lo sabía.
- Mucho tiempo pensé en ser suelo conforme al acto, ahora quiero una nueva forma.
- Pero... me va tomar mucho trabajo.
- No. Porque me lo deben. Nadie me aviso de mi acto[2]. Nadie me aviso adonde me llevaría mi potencia. Además, quien o que me atribuyó esta forma de humano. Esta especie de forma.
- Entonces voy a ser lo que sea.
- No estoy seguro de eso, porque fui y soy. Ya me quite la potencia de ser.
- Es que... quiero ser yo la potencia.
- Nunca me lo va a permitir mi forma actual.
- Porque es caro, y mucho arriesgo en pensarlo.
- ¿Si pensarlo no cuesta?
- Claro que si. Estoy siendo en pensarlo. Siendo pensamiento, valiéndome de la suciedad de las ideas. En una clase de potencial abstracto y absurdo.
- ¿Siendo qué? ¿Siendo potencia?
- Ya no sé. Sólo sé que me quedo en el acto de actuar ante la nada. De engañarme y ocultarme las posibilidades de cambios.
- Me estoy engañando a mi mismo. Trato de justificarme sin saber que quiero justificar. Que idiota.
- Igual ya sacrifique mil formas, millones de no formas y miles de millones de potencias que nunca tendré.
- ¿No sé qué quiero decir? ¿No sé qué delirio es éste?
- Es claro. Pues, el tiempo que tomé en mover mis partes y ensuciar mi pensamiento, en abrirme en movimiento opuestos: se volvió un sacrificio.
- y... ¿Cuánto tiempo me tomó? ¿Cuánto fue el costo?
- el mismo que tardé en parpadear otra ves.
[1] No-forma, forma inicial, potencia inicial: como transición entre volver a ser potencia de ser, y el Acto puro.
[2] Acto: juego de palabra que refiere a su vez, a la acción y a la actualidad de la potencia en el ser.

No hay comentarios: